OSLO – Una manera fácil de generar un largo y acalorado debate consiste en mencionar el tema de la población mundial. Son bien conocidos los apasionados argumentos que Thomas Malthus causó en el siglo diecinueve al advertir que, en ausencia de medidas de control demográfico, la población mundial crecería exponencialmente a un ritmo que superaría los avances en la agricultura y provocaría brotes recurrentes de hambruna y enfermedades. La industrialización ayudaría a posponer la crisis, pero no para siempre.
OSLO – Una manera fácil de generar un largo y acalorado debate consiste en mencionar el tema de la población mundial. Son bien conocidos los apasionados argumentos que Thomas Malthus causó en el siglo diecinueve al advertir que, en ausencia de medidas de control demográfico, la población mundial crecería exponencialmente a un ritmo que superaría los avances en la agricultura y provocaría brotes recurrentes de hambruna y enfermedades. La industrialización ayudaría a posponer la crisis, pero no para siempre.