WASHINGTON, DC – Que los periodistas salgan a las calles a cubrir las protestas más multitudinarias y extendidas que Estados Unidos haya experimentado en más de cincuenta años no tiene nada de sorprendente. Lo que sí sorprende es que se hayan encontrado con violencia y represalias por parte de la policía, sólo por hacer su trabajo.
WASHINGTON, DC – Que los periodistas salgan a las calles a cubrir las protestas más multitudinarias y extendidas que Estados Unidos haya experimentado en más de cincuenta años no tiene nada de sorprendente. Lo que sí sorprende es que se hayan encontrado con violencia y represalias por parte de la policía, sólo por hacer su trabajo.