KIEV – En 2014, Vladimir Putin descubrió a su Trotski interno; Lo que ahora el presidente ruso ofrece Ucrania es un giro perverso de la fórmula proclamada por Trotski durante las negociaciones de paz de 1918 en Brest-Litovsk: «No hay paz sin guerra». Con ello, Putin no solo ha actuado para dejar a mi país atrapado en un conflicto helado que evitará tanto que la democracia como la economía florezcan; ha destruido las reglas y normas que mantuvieron la paz en Europa durante tres generaciones.
KIEV – En 2014, Vladimir Putin descubrió a su Trotski interno; Lo que ahora el presidente ruso ofrece Ucrania es un giro perverso de la fórmula proclamada por Trotski durante las negociaciones de paz de 1918 en Brest-Litovsk: «No hay paz sin guerra». Con ello, Putin no solo ha actuado para dejar a mi país atrapado en un conflicto helado que evitará tanto que la democracia como la economía florezcan; ha destruido las reglas y normas que mantuvieron la paz en Europa durante tres generaciones.