CARACAS – Las instituciones democráticas de Venezuela están en ruinas, sus arcas vacías, y sus ciudadanos buscan comida en la basura. Los venezolanos se mueren de hambre, de enfermedades evitables y curables (a tasas mucho más altas que el promedio latinoamericano) y por hechos de violencia, en algunos casos, baleados por su propio gobierno.
CARACAS – Las instituciones democráticas de Venezuela están en ruinas, sus arcas vacías, y sus ciudadanos buscan comida en la basura. Los venezolanos se mueren de hambre, de enfermedades evitables y curables (a tasas mucho más altas que el promedio latinoamericano) y por hechos de violencia, en algunos casos, baleados por su propio gobierno.