WASHINGTON, DC – “Nada frena una bala más que un trabajo”. Así dice el padre Gregory Boyle, un cura jesuita y fundador de Homeboy Industries, el programa de intervención y rehabilitación de pandillas más grande del mundo. En mayo, Boyle recibió la Medalla Presidencial de la Libertad, la mayor condecoración civil en Estados Unidos. Su fe en la importancia del trabajo ofrece lecciones para los responsables de las políticas económicas.
WASHINGTON, DC – “Nada frena una bala más que un trabajo”. Así dice el padre Gregory Boyle, un cura jesuita y fundador de Homeboy Industries, el programa de intervención y rehabilitación de pandillas más grande del mundo. En mayo, Boyle recibió la Medalla Presidencial de la Libertad, la mayor condecoración civil en Estados Unidos. Su fe en la importancia del trabajo ofrece lecciones para los responsables de las políticas económicas.