El 20 de enero los serbios acudirán a las urnas para la primera vuelta de unas elecciones presidenciales que pueden decidir el futuro del país para las próximas décadas. A medida que el nuevo gobierno de Kosovo prepara una declaración unilateral de independencia, los serbios se enfrentan a una elección difícil: conservar Kosovo y cortar en efecto los lazos con la Unión Europea, o aceptar la dolorosa realidad de la independencia kosovar y optar por un nuevo futuro con la UE.
El 20 de enero los serbios acudirán a las urnas para la primera vuelta de unas elecciones presidenciales que pueden decidir el futuro del país para las próximas décadas. A medida que el nuevo gobierno de Kosovo prepara una declaración unilateral de independencia, los serbios se enfrentan a una elección difícil: conservar Kosovo y cortar en efecto los lazos con la Unión Europea, o aceptar la dolorosa realidad de la independencia kosovar y optar por un nuevo futuro con la UE.