PRINCETON – El gobierno del presidente estadounidense Joe Biden se ha negado a imponer sanciones directas al príncipe heredero de Arabia Saudita Mohammed bin Salman, a pesar de la evaluación recientemente publicada por la CIA sobre que fue él quien “aprobó una operación [...] para capturar o matar” al periodista saudí Jamal Khashoggi en Estambul en el año 2018. Al no castigar a MBS, acrónimo con el que es ampliamente conocido el gobernante de facto del Reino, Biden ha decepcionado a muchos. Pero Biden, correctamente, puso por delante una de las relaciones exteriores más importantes de Estados Unidos.
PRINCETON – El gobierno del presidente estadounidense Joe Biden se ha negado a imponer sanciones directas al príncipe heredero de Arabia Saudita Mohammed bin Salman, a pesar de la evaluación recientemente publicada por la CIA sobre que fue él quien “aprobó una operación [...] para capturar o matar” al periodista saudí Jamal Khashoggi en Estambul en el año 2018. Al no castigar a MBS, acrónimo con el que es ampliamente conocido el gobernante de facto del Reino, Biden ha decepcionado a muchos. Pero Biden, correctamente, puso por delante una de las relaciones exteriores más importantes de Estados Unidos.