BEIJING – En los últimos años, el papel de liderazgo de China a la hora de establecer nuevas instituciones multilaterales –incluida la Organización de Cooperación de Shanghái, el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (AIIB) y el Nuevo Banco de Desarrollo- ha generado temores de que el gobierno pretenda derribar el orden mundial existente. Esta interpretación ignora un punto crucial: China se ha beneficiado inmensamente de ese orden y sigue participando activamente en él. Es más, lo ha llegado a defender ardientemente.
BEIJING – En los últimos años, el papel de liderazgo de China a la hora de establecer nuevas instituciones multilaterales –incluida la Organización de Cooperación de Shanghái, el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (AIIB) y el Nuevo Banco de Desarrollo- ha generado temores de que el gobierno pretenda derribar el orden mundial existente. Esta interpretación ignora un punto crucial: China se ha beneficiado inmensamente de ese orden y sigue participando activamente en él. Es más, lo ha llegado a defender ardientemente.