BOSTON – Desde hace un tiempo, el menosprecio de la industria del tabaco por las vidas de la gente, el derecho internacional y la soberanía nacional está en el candelero. Investigaciones realizadas por entidades de la talla de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el diario Guardian revelaron pruebas innegables de lo que la comunidad de la salud pública sabe hace décadas: que las grandes tabacaleras, en su búsqueda incesante de ganancias, hacen todo lo posible por subvertir, bloquear y debilitar los mecanismos de protección de la salud pública.
BOSTON – Desde hace un tiempo, el menosprecio de la industria del tabaco por las vidas de la gente, el derecho internacional y la soberanía nacional está en el candelero. Investigaciones realizadas por entidades de la talla de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el diario Guardian revelaron pruebas innegables de lo que la comunidad de la salud pública sabe hace décadas: que las grandes tabacaleras, en su búsqueda incesante de ganancias, hacen todo lo posible por subvertir, bloquear y debilitar los mecanismos de protección de la salud pública.