PRAGA - El devastador terremoto y tsunami que azotó Japón el 11 de marzo ha causado enormes daños físicos - agravados por la amenaza de un desastre nuclear- en las zonas costeras del noreste del país, y ha reavivado graves temores en el único país que ha experimentado plenamente el potencial de horror que reside dentro de un átomo. Miles están desaparecidos, cientos de miles han sido desplazados y millones se encuentran sin agua, comida o calefacción, bajo temperaturas cercanas al punto de congelación. Se teme que el número de muertos supere los 15.000.
PRAGA - El devastador terremoto y tsunami que azotó Japón el 11 de marzo ha causado enormes daños físicos - agravados por la amenaza de un desastre nuclear- en las zonas costeras del noreste del país, y ha reavivado graves temores en el único país que ha experimentado plenamente el potencial de horror que reside dentro de un átomo. Miles están desaparecidos, cientos de miles han sido desplazados y millones se encuentran sin agua, comida o calefacción, bajo temperaturas cercanas al punto de congelación. Se teme que el número de muertos supere los 15.000.