La salida del aire de TV-6 representó un triste día para la Rusia de Vladimir Putin. Este suceso no sólo dañó la causa de la libertad de expresión, sino que el Estado de derecho recibió una profunda herida y el presidente Putin desperdició la buena voluntad de las mismas personas que él quiere emular en Occidente.
La salida del aire de TV-6 representó un triste día para la Rusia de Vladimir Putin. Este suceso no sólo dañó la causa de la libertad de expresión, sino que el Estado de derecho recibió una profunda herida y el presidente Putin desperdició la buena voluntad de las mismas personas que él quiere emular en Occidente.