WASHINGTON, DC – Fuera del terreno de la seguridad, una reforma del Banco Mundial le ofrece a la administración del presidente norteamericano, Joe Biden, su mayor oportunidad para un logro clave en política exterior. El Banco Mundial debería ser un vehículo importante para la respuesta ante las crisis, la reconstrucción post-conflicto y, más importante, el respaldo de las enormes inversiones necesarias para un desarrollo global sostenible y saludable. Pero actualmente no lo es.
WASHINGTON, DC – Fuera del terreno de la seguridad, una reforma del Banco Mundial le ofrece a la administración del presidente norteamericano, Joe Biden, su mayor oportunidad para un logro clave en política exterior. El Banco Mundial debería ser un vehículo importante para la respuesta ante las crisis, la reconstrucción post-conflicto y, más importante, el respaldo de las enormes inversiones necesarias para un desarrollo global sostenible y saludable. Pero actualmente no lo es.