BAKÚ – Invertir en la producción de baterías para vehículos eléctricos puede parecer una apuesta segura. Y, a simple vista, Northvolt -el desarrollador y fabricante sueco de baterías para vehículos eléctricos (VE) que se declaró en quiebra en noviembre- parecía tener todas las ventajas y capacidades necesarias para triunfar.
BAKÚ – Invertir en la producción de baterías para vehículos eléctricos puede parecer una apuesta segura. Y, a simple vista, Northvolt -el desarrollador y fabricante sueco de baterías para vehículos eléctricos (VE) que se declaró en quiebra en noviembre- parecía tener todas las ventajas y capacidades necesarias para triunfar.