neuding5PAUL WENNERHOLMTT News AgencyAFP via Getty Images_marin andersson PAUL WENNERHOLM/TT News Agency/AFP via Getty Images

El fin de la neutralidad nórdica

ESTOCOLMO – Durante la Guerra Fría, el principio de «no alineación en la paz, neutralidad en la guerra» fue no sólo un componente de la doctrina de seguridad de Suecia, sino también factor de identidad nacional y autopercepción de los suecos. Pero esta tradicional postura sueca de no alineación puede estar a punto de cambiar, ya que es probable que la invasión rusa de Ucrania motive a ambos países a solicitar el ingreso a la OTAN.

El 8 de marzo, dos semanas después de que el presidente ruso Vladímir Putin iniciara su guerra en Ucrania, la primera ministra sueca Magdalena Andersson (del Partido Socialdemócrata) señaló que pedir el ingreso a la OTAN «en la situación actual (…) desestabilizaría todavía más esta región de Europa y aumentaría las tensiones». Muchos comentaristas de centroderecha la acusaron de inmediato de aceptar la visión de Putin según la cual que un estado soberano decida unirse a la OTAN puede considerarse una provocación a Rusia.

Pero fuertes señales surgidas del interior del Partido Socialdemócrata indican que es posible que Suecia pida ingresar a la OTAN en la próxima reunión de la Alianza que tendrá lugar en Madrid en junio. La postura del país en materia de seguridad ya ha tenido un cambio radical. El gobierno envió armas a Ucrania, y la población sueca está buscando en Google información sobre refugios antibomba y píldoras de yodo.

https://prosyn.org/STchEmdes